El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) es una contribución donde se exponen y justifican los beneficios económicos obtenidos durante la actividad laboral. Es importante tener en cuenta que solo debe declarar por las rentas que se consideren obtenidas en territorio español. Para aquellos residentes en el extranjero, la tributación será sobre el impuesto sobre la Renta de no Residentes (IRNR).
Sin embargo, en este artículo nos centraremos en conocer qué es exactamente este impuesto y cómo calcularlo. Hay que tener en cuenta que existen dos tipos de base imponible a efectos del IRPF; la base imponible general y la base imponible del ahorro.
A continuación, se detallan las más comunes:
- Base imponible general: es la suma de los ingresos obtenidos por el contribuyente en el año fiscal, incluyendo el salario, las rentas del capital mobiliario, las rentas inmobiliarias y las actividades económicas.
- Base imponible del ahorro: se calcula a partir de las rentas del capital mobiliario y las ganancias o pérdidas patrimoniales derivadas de la transmisión de bienes y derechos de contenido económico.
Se trata de un impuesto progresivo, por lo que conforme aumentan los ingresos de la persona contribuyente, mayor será su aportación.