Allá por el año 490 a.C., Filípides murió tras recorrer más de 42 kilómetros corriendo para llevar la noticia de que Atenas había triunfado sobre el ejército persa. Hoy día, hubiera bastado con un tuit del gobernador de Atenas anunciándolo en su cuenta de Twitter, o un video en directo desde Facebook comunicando la buena nueva.
Las redes sociales llegaron para quedarse, para transformar nuestra manera de entender las relaciones humanas, para inaugurar nuevas formas de interacción e información y para hacer de la comunicación virtual un aliado. Más allá de las que todos conocemos, como Facebook, Twitter, Instagram o Twitter, existe una amplia lista de redes según intereses, perfiles y objetivos perseguidos. Pero, empecemos por el principio, ¿qué son las redes sociales?
Se considera red social una plataforma o página web en la que dos usuarios establecen una relación y que permite estar informado de los contenidos que dichos usuarios comparten. Es un lugar de encuentro donde compartir, interactuar y crear comunidades virtuales sobre intereses comunes. Además, las redes sociales se han convertido en un espacio para que empresas y marcas den a conocer sus productos.
Se crearon con el objetivo de reunir personas, y así sigue siendo, aunque con matices. Hoy tenemos cantidad de plataformas de diversas categorías, algunas de carácter personal y otras más profesionales, que comparten una serie de características:
Interacción: las redes se usan para comunicarse y expresarse, para compartir y estar al tanto de las novedades de un contacto, una empresa, una institución…
Vínculos y conectividad: las redes crean lazos entre usuarios, ayudan a crearlos y mantenerlos.
Tiempo real: la interacción en las redes sociales es continua y las respuestas son inmediatas.
Comunicación multimedia: en las redes el lenguaje es el de Internet: texto, imagen, video, audio…
Multiplicación del mensaje: en estas plataformas es fácil la propagación de los contenidos y su influencia. Los mensajes pueden hacerse virales.
En conjunto, las redes sociales han crecido de manera exponencial, aunque unas más que otras, motivado en parte por el uso de dispositivos móviles como smartphones o tablets. El desarrollo de lasapps ha hecho que las redes sociales quepan en el bolsillo.
El universo de las redes sociales (o social media) es amplio y establecer una clasificación no siempre es fácil, ya que hay algunas que ocupan varias categorías. Pero entremos en acción y veamos qué tipos de redes existen.
La red social vertical está especializada en un tema concreto y facilita la conexión y la comunicación entre usuarios unidos por ese interés común. Pueden dividirse por la temática, la naturaleza del contenido o el tipo de actividad. Por ejemplo, Linkedin.
La red social horizontal: no están delimitadas por una temática concreta sino que se emplean partiendo de relaciones más amplias y no basadas en un interés común. Están dirigidas a un público genérico. Por ejemplo, Facebook o Twitter.
Cuando pensamos en redes sociales, todos pensamos en ella. Es la primera, por antigüedad y por número de usuarios. Es muy útil para conectar con amigos (o desconocidos) y compartir contenido de todo tipo que haga aumentar la interacción con tus contactos y la generación de más engagement.
En Facebook podemos encontrar perfiles personales o fanpages, páginas de empresas que suponen un verdadero filón para dar a conocer sus productos. Los perfiles van dirigidos a personas físicas cuyo objetivo es compartir con su red de contactos sus intereses y sus inquietudes a través de fotos, videos, texto, posts. En Facebook puedes contar a tus amigos qué te ha pasado, cómo te sientes, qué has hecho, qué opinas de algún asunto y puedes compartir recursos como videos, páginas webs u otro contenido de interés.
Todo lo que compartas en Facebook queda reflejado en la línea de tiempo de tu biografía. Como no querrás compartirlo todo con todos tus contactos, puedes organizarlos en listas. Por supuesto, existe la posibilidad de privatizar tus contenidos y tu perfil y destinarlos solo a tus amigos.
Facebook es la red por excelencia, lo que significa que en ella podemos encontrar todo tipo de perfiles y de intereses.
Es la red social que impera en China, de donde son la mayor parte de sus usuarios. Funciona de modo parecido a Facebook y le sigue en número de perfiles. Acumula millones de usuarios a pesar de ser una desconocida en occidente.
Permite a los usuarios compartir textos, fotos videos o escuchar música. Eso sí, la mayoría de estas funcionalidades no son libres. Para ello es necesario comprar el “Canario diamante”, un pago diamante con el que los usuarios de Qzone pueden exprimir los servicios básicos que ofrece la red social china por excelencia.
Google+
Ya descansa en el cielo de las redes sociales desde hace algo más de un año debido a algún problemilla de seguridad y probablemente porque nunca encontró su sitio aunque Google se empeñara. Pero por su papel destacado en la historia de las 'social media' merece una mención. Más que una red social fue centro e integración de todos los servicios que ofrece el gigante Google. Esto nos permitía compartir nuestras búsqueda en Google Maps, información de nuestros contactos de Gmail o una publicación que hubiéramos hecho en Blogger.
Bastaba con tener cuenta en Gmail para ser usuario. A partir de ahí podíamos empezar a buscar a nuestros contactos, que se organizaban en círculos: una manera de agruparlos y organizarlos según intereses. De esta manera compartíamos lo que publicamos de una manera segmentada, y pública o no.
Twitter es la red de la inmediatez de las noticias. Y de los haters (alguien tenía que decirlo). Es el espacio de microblogging por excelencia. Permite escribir de lo que te plazca en un espacio tasado de 280 caracteres llamado tuit. En Twitter sigues a otros usuarios, de los que te llegan sus mensajes a tu timeline, y pueden seguirte a ti, a quienes llegan tus tuits. Las cuentas que sigues puedes organizarlas en 'listas', según intereses.
Además de texto, permite compartir también fotos y videos, que son clasificados según su temática mediante hashtag (#). Además, los temas de los que más se está hablando en twitter conforman una lista de tendencias, 'Trendic Topic'.
Es la red social donde estar al día de las novedades y noticias del sector que te interese, de ahí que aquí tengan cabida los amantes de la comunicación digital.
El video arrasa en redes sociales y si hablamos de redes sociales basadas en este formato, inevitablemente tenemos que pensar en Youtube. Tal es su envergadura que es el sitio donde más búsquedas se realizan en internet por detrás de Google. Ha supuesto una autentica revolución en la comunicación audiovisual.
Este espacio alberga miles de videos que los usuarios suben en forma de música, o tutoriales sobre los temas más variopintos y videos de todo tipo. Como usuario creas tu propio canal, donde subir tus videos. El carácter de red social le viene de la interacción entre usuarios, que pueden indicar si tu contenido gusta o no, pueden compartirlo, comentarlo o suscribirse a tu canal.
Como normalmente ocurre en el resto de redes, los videos que subes pueden ser públicos o privados, se agrupan en secciones y en listas de reproducción.
El impacto de esta plataforma es tal que si te conviertes en un Rubius puedes ganar dinero con tu contenido gracias a anuncios AdSense. La red permite además hacer videos en directo.
Si fuiste de los que usaste la cámara de fotos que tu tía te regaló en la comunión esta es tu red social. Instagram es a la foto lo que Youtube al video. En esta red social puedes tratar tus imágenes (también videos) con múltiples efectos y filtros y después compartirla con tu red de seguidores. Permite hacer videos en directo, encuestas, localizar tus fotos, incluir emoticonos, música y múltiples funciones que enriquecen el contenido.
Los contenidos se quedan fijado en tu perfil o no, gracias a Instagram Stories, una funcionalidad que hace que las fotos o videos 'desaparezcan' de tu perfil a las 24 horas (funcionalidad copiada de Snapchat, sí). Es posible también compartir ese contenido en otras redes sociales.
Al igual que ocurre en Twitter, la red de contactos es unidireccional: puedes seguir a usuarios que no te siguen a ti y viceversa. También las fotos suelen etiquetarse con el hashtag (#) según intereses y temática.
Es 'la otra' red social de video, aunque cuenta con algunas particularidades respecto a Youtube. La principal es la calidad de sus videos, lo que hace que muchos profesionales se decanten por Vimeo, la extensión de los mismos y la ausencia de publicidad al inicio de la reproducción.
Vimeo ofrece la posibilidad de compartir y almacenar tus creaciones audiovisuales para que los usuarios del portal comenten y compartan. A través de la configuración de las cuentas, Vimeo pretende evitar las descargas y también permite tener videos privados solo accesibles a personas concretas. Además, ofrece opciones gratuitas y de pago, para subir contenidos más voluminosos por semana.
Más allá de vídeos profesionales, de larga duración o pensados para aprender o instruir, nace Tik-tok. La red social revelación en la actualidad, que aumenta notablemente el número de usuarios y que se ha convertido en la red social china más internacional. Con Tik-Tok puedes compartir pequeños videoclips musicales de un minuto, a los que añadir efectos y música, filtros y algunos efectos especiales. Su fugacidad y su orientación a un público joven, unido a la versatilidad de los efectos, ha hecho de esta plataforma la red social del año.
La aplicación incluye la posibilidad de enviar mensajes, votar, comentar, hacer votaciones y ver la lista de seguidores y seguidos.
Es una red social ágil y divertida que muchos comparan con Instagram.
Si hablamos de Flick lo hacemos no solo de una red social para buscar y enlazar fotografías a nuestros blogs y perfiles en otras redes, también hablamos de un sitio web donde almacenar imágenes y videos. Con Flickr puedes crear álbumes, editar y navegar por tus fotos y unirte o crear grupos según tus intereses. Puedes unirte a todos los que te gusten y se ajusten a tus demandas. Una vez aceptado en el grupo, puedes agregar fotos al mismo. Los grupos son administrados por el moderador, que es el creador del grupo.
En realidad, Spotify es una plataforma de reproducción de música en streaming. Pero como nexo de unión entre personas con un interés común, puede entenderse como red social, aunque hay quienes no lo ven con tanta claridad. En Spotify puedes crear tus propias listas de reproducción, seguir las listas de otros usuarios, seguir otros perfiles o estar al tanto de las novedades de tus artistas y géneros musicales favoritos. Y no solo de música se alimenta la plataforma, ya que con los podcasts ha encontrado una ventana de oportunidad.
Como en otras redes sociales, ofrece la posibilidad de compartir estos contenidos en otros perfiles, como Facebook, Twitter o Tinder.
También tiene versión de pago, con importantes diferencias con su versión gratuita, como la ausencia de publicidad invasiva o la navegación por las listas de reproducción.
En SoundCloud el productor musical eres tú mismo. Con esta red puedes grabar y subir sonidos y compartirlos con amigos, blogs o tus perfiles en otras redes. Nació con la idea de que los usuarios pudieran colaborar, promocionar y lanzar sus proyectos musicales, como una lanzadera para que los músicos distribuyeran su música. Además de compartir sonidos, permite comentarlos e interactuar con ellos.
Esta función abrió la puerta a otra finalidad en boga: la de grabar podcasts sobre distintas temáticas, subirlos, realizar comentarios y compartirlos.
SoundHound busca, descubre y ofrece información sobre la música que escucha a través del micrófono de tu dispositivo. Identifica canciones que estés oyendo o simplemente si la cantas, tarareas o silbas. Te dice su letra y puedes reproducir, compartir en otras redes como Facebook o Twitter, ver videos musicales o agregar estas búsquedas a una lista de reproducción que puedes transferir a tu playlist de Spotify. Analiza tus gustos musicales y ofrece recomendaciones personalizadas, imágenes de tus artistas favoritos y videos musicales basados en tu actividad en la plataforma.
SoundHound te muestra las canciones que otros usuarios han reproducido cerca de tu ubicación.
Si nos adentramos en el amplio mundo de las redes sociales de citas y contactos, tenemos que deteneros en Tinder. En este caso el interés que une a sus usuarios es ligar. Una vez que te has registrado en la aplicación, debes rellenar una serie de datos sobre tus gustos y preferencias y Tinder, basándose en estos indicadores, te ofrece una serie de perfiles con los que puedes encajar en el puzzle del amor.
Ojeando las fotos de esos perfiles puedes determinar si es lo que buscas o no. Si te gusta, deslizas a la derecha; si no, a la izquierda. Cuando dos perfiles se gustan mutuamente, la aplicación avisa y entonces podréis iniciar una conversación privada. Su versión de pago permite otras funciones.
De manera similar funciona Badoo, y con el mismo objetivo que Tinder: encontrar el amor. En esta otra red social existen dos manera de conocer a alguien. Una, mediante la sección 'Encuentros', en la que la red social te muestra perfiles compatibles contigo según tus criterios y preferencias a los que das al botón del corazón si son lo que buscas. Otra, en la sección 'Personas cercanas', basada en perfiles cerca de tu ubicación, según tus intereses.
En Badoo se pueden puntuar los perfiles y se puede ver el número de personas que han visto el nuestro.
Encontrar trabajo nunca fue fácil. Por eso en un mundo digital y globalizado, tenía que haber una red social que conecte profesionales. Ese es el objetivo principal de Linkedin. Es la red social profesional más potente del mundo que une profesionales de cualquier sector en búsqueda de una oportunidad laboral con empresas en búsqueda de candidatos. El primer paso en esta red social es confeccionar tu currículum a través de tu formación, tus experiencias laborales y tus competencias profesionales. A partir de ahí, Linkedin te sugiere contactos que hayan pasado por las mismas empresas o centros de estudio que tú. Es un potencial entorno para el networking y para compartir conocimiento sobre tu sector.
Gracias a los grupos, podrás compartir tus conocimientos y aprender de los colegas de tu sector. En ellos se informa de las últimas novedades que te interesan y podrás consultar dudas con otros profesionales.
Con la herramienta de búsqueda y de alertas podrás acceder a las ofertas que las empresas publican y que se ajustan a tu perfil.
Es otra plataforma de networking online, centrada en profesionales chinos. Al igual que Linkedin conecta profesionales de cualquier sector, con la particularidad de que Xing se basa en el principio de los Seis grados de separación (esa que dice que todos los seres de la tierra estamos conectados a través de redes de cinco contactos).
Xing permite la interacción entre los usuarios a través de foros de discusión de diferentes ámbitos, abiertos o cerrados. A través de su bolsa de empleo, los usuarios pueden ofrecer o buscar puestos de trabajo y proyectos. Al igual que Linkedin, permite el envío de mensajes privados.
Es una red social que agrupa a mujeres profesional en un mundo donde el movimiento feminista y sus reivindicaciones se abre paso. Es un referente para dar visibilidad al talento femenino y al networking con nombre de mujer. Une a profesionales a través de una red de contactos, organiza eventos para dar a conocer a las usuarios de manera personal, tiene un directorio de proveedores, ofertas y productos, posee un conjunto de expertos sobre diversas temáticas para resolver dudas de distintos sectores, publica ofertas de empleo, y una sección de contenidos sobre tu ámbito profesional.
Hasta aquí una selección básica de la amplia gama de redes sociales. Ahora, de ti depende por qué red apostar, según tus intereses, tus metas y tus objetivos. Si quieres saber más sobre redes sociales y quieres adentrarte en el mundo de los Social Media, en Bilib ponemos a tu alcance este curso básico gratuito sobre redes sociales.
Además, dispones de una Red de Centros de Internet y Puntos de Inclusión Digital (PID) donde navegar por estas y otras redes sociales.